Si de arte hablamos en Castilla y León, debemos empezar quizás por uno de los artistas más admirados en nuestra tierra, especialmente Valladolid: Gregorio Fernández. Este escultor tiene dos curiosidades, todo el mundo piensa que es de Valladolid, nació en Lugo, y la mayoría de nosotros hemos visto y admirado sus obras, aunque no sepamos que son suyas, los pasos de Semana Santa. Por eso, en Patrimonio Activo hemos pensado que ya es como si fuera uno de nuestros artistas más queridos y que debemos tratarle como a tal.
Maestro de la escultura barroca
No en vano, Gregorio Fernández es uno de los artistas más importantes de la escultura barroca española y, en concreto, de la Escuela de Valladolid o Escuela Castellana. Todos los expertos lo califican como el heredero de la expresividad de Alonso Berruguete y Juan de Juni. Eso sí, no se conformó con eso, se liberó del manierismo y consiguió un estilo propio al beber también del clasicismo de Pompeyo Leoni y Juan de Arfe.
Nacimiento y primeros encargos
Nacido en Sarria (Lugo) en 1576, Gregorio Fernández se trasladó a Valladolid en 1605. La corte estaba allí y allí debía estar un artista que aspiraba a lo máximo. Entró en la escuela de Rincón y muy pronto realizó encargos para Felipe III, el Duque de Lerma, los Condes de Fuensaldaña o las principales órdenes monásticas. En 1605 abrió su propio taller y se casó con María Pérez Palencia, con quien tuvo varios hijos.
Un santo
Durante toda su vida fue considerado como un hombre de virtud, casi un santo, ya que asistió en su propia casa a infinidad de desvalidos y hambrientos. Cuenta la leyenda que antes de trabajar oraba, ayunaba y se sometía a penitencia. Parece ser que esto le venía del misticismo de Bernini o Martínez Montañés para quienes esculpir una imagen religiosa era un compromiso de fe.
El triunfo y el reconocimiento artístico le llegan con su primer monumento a Galdós, situado en El Retiro madrileño…
Fallecimiento
Falleció el 22 de enero de 1636 debido a problemas de salud que sufrió desde 1624. Fue enterrado en el Convento del Carmen Calzado.
Obra de Gregorio Fernández
Su obra refleja más lo espiritual o místico que lo estético y eso se nota en que sus esculturas transmiten dolor, espiritualidad y dramatismo. Esto se ve en la profusión de sangre y de lágrimas que incluye en las figuras con gran verdad. Esto es gracias a la honda expresión de los rostros, y en los postizos (pelucas, ojos de cristal, dientes de marfil, lágrimas de resina…). La sencillez que también tienen sus obras viene dada por la composición del conjunto, la contención de los gestos y por el drapeado de los ropajes o «plegado metálico». Por eso, todo el mundo académico está de acuerdo en que «Fue el creador de modelos fundamentales de la imaginería barroca española, como los Cristos yacentes, las piedades o los crucificados». Además, sus retablos crearon escuela al alejar sus conjuntos escultóricos de la estética escurialense para promover una contrarreforma en la que España se implicó tanto.
La mayor magnitud de su obra puede verse en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, quien presta algunas de sus piezas a las cofradías pucelanas para que salgan en procesión durante de la Semana Santa.
Destacamos
- Cristo del Consuelo (1610, Cofradía del Santo Sepulcro)
- Cristo de la Luz (h. 1630, Hermandad Universitaria del Santo Cristo de la Luz)
- La Sexta Angustia (1619, Cofradía de las Angustias)
- Nuestra Señora de la Vera Cruz (1623, Cofradía de la Santa Vera Cruz)
- Cristo atado a la Columna (1619, Cofradía de la Santa Vera Cruz)
- Ecce-Homo (1620, Cofradía de la Santa Vera Cruz)
- El Descendimiento (1623, Cofradía de la Santa Vera Cruz)
- Cristo Yacente de la iglesia de San Miguel y San Julián de Valladolid
- La Piedad (1620) del convento de las Clarisas de Carrión de los Condes (Palencia)
- Retablo mayor del Monasterio de las Huelgas Reales de Valladolid
- Retablo mayor de la catedral nueva de Plasencia
Si quieres conocer más personajes importantes de Castilla y León, como Gregorio Fernández, no tienes más que buscar en nuestra sección «¿Quién es quién?», de nuestra web, la de Patrimonio Activo.
(Imagen: https://www.museodelprado.es/)