Yn a en otra entrada de esta misma página, os hablábamos de la boda charra y algunos de sus aspectos: cómo eran los preparativos y la ceremonia. En este artículo os contamos cómo es la celebración, qué se come y cómo es el día posterior al banquete en una boda tradicional en Salamanca.
La comida de una boda charra
Empezamos recordando que el novio, al llegar al lugar del banquete, que normalmente era en su casa, daba inicio a la celebración quitándose el sombrero. Ese era el momento en el que se empezaba a servir la bebida y la comida. Pero, qué se comía en una boda charra. Muy sencillo: un cocido. Sí, amigo, un cocido con todo: sopa de pan y huevo, garbanzos, chorizo, carne, tocino, oreja, etc. ¿Y de postre? Sí, lo has adivinado: arroz con leche. Y durante la comida: se cantaban canciones populares y se gritaba aquello de «¡Vivan los novios!».
El baile
Eso sí, nada más terminar de comer, se hacía la «ofrenda del tálamo», o lo que es lo mismo: los objetos que cada uno aportaba al matrimonio. Y, después, el baile, abierto por los novios y regado con limonada. En alguna boda charra se hacía el baile de las prendas, una pieza por cada una de las prendas del ajuar de la pareja.
Pagaban por bailar con ellos. Era una forma de lo que hoy se conoce como espiga…
Esto debía ser un poco cansado porque, además, los mozos le pedían bailar a la novia y las mozas al novio, lo cual debía ser algo movido. Eso sí, pagaban por bailar con ellos. Era una forma de lo que hoy se conoce como espiga. Cuando llegaba la noche, también se daba de cenar a los invitados.
Lunes de bodas
Y al día siguiente, «lunes de bodas», ya que las bodas solían ser en domingo festivo, se ofrecía una comida a los novios: calderillo o guiso de carne con patatas y los mozos y mozas se iban a merendar.
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(Imagen: http://enateneo.blogspot.com/)